Brindo/brinco conmigo xx.
después de haber tirado las copas,
y tú lo sabías... -que iba a pasar-
Sobre su lecho de cristales rotos/
alfileres en mi piel salpicados, infeliz
las veinticuatro horas del día.
Aprieto al frágil huésped/de tu alien...
-mi enamorado, eterno corazón-
y te lo reembolso... -no sin antes- haberlo rodeado/
estrechándolo entre mis pulmones
con un fuerte abrazo y/profundo suspiro
que lo atraviesa como la flecha inexistente
de nuestro -en huelga- cupido.
Y todo porque me ha parecido verte llegar
sin estar preparado...
atada desde tu cordón umbilical de la razón/
en mitad del espacio de una calavera sin seso
envasada al vacío... -flotando-
en un témpano de hielo/iceberg otra vez.
El saco del miedo,
-eco de esa voz me atosiga-/cielo ciego... -entiéndelo-
de principio a fin...
Ese es mi sino/signo, -yugo del cabreo/cabestro-
y la campana
badajo colgando al cuello de las ingles
tambaleándose ya en ruinas...
Y vuelo alto
con las alas desplegadas de mi boca a gritos/
los labios empujando la voz muda hacia donde estás...
como un latido/
latigazo en el lomo de la bestia
de la compasión olvidadiza.
Reo de mi honor defenestrado... -ahora en el calabozo
precadalso-
calabobos de mi Tin Toy del Toys"R"Us/
tú sabrás...¿?
Tu pájaro lobo/Ícaro derretido cae desde lo alto
aplastado por la piedra de Sísifo... que resbala
en la negra noche donde mi alma se ha quedado prisionera
-igual que una lluvia de estrellas de babas/babosa
en los ojos de cristal de una estatua
con vida/rota...-
Y como un tonto principito, con mi bufanda al cuello/
soga atada a tu muñeca Marujita,
me dejo ir...
yoyó de tus juegos de primavera en el templo de Atenea/
antenas/cuernos del caracol de la esperanza
acariciados
por las yemas de unos dedos sin fe... Tú.
Pero no me importa, hay más agujas de cambio
en la estación del tren/a cada metro de la eternidad
donde se pueda morir de diferentes formas
y yo...
yo he elegido este calvario
sin monte ni cruz/ pero en vías de extinción
-estrecha-.
A mi corazón de gato, le sobra una vida...
-eso me dijo el doctor la última vez-
Que de cada tres infartados cae uno
y yo en proporción/llevo seis...-
-El cava no estaba malo, -ni mucho menos...-
¡Rico, rico!
Sólo es tu cabeza
que se atonta/amontona/-atora con poco- chaval!
Déjate respirar en lo profundo
-embolsa el aire...- contenlo y siente el mareo
de la felicidad en su huida/
¡Vale... ponme otra!
* Publicado anteriormente 29710/18
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Pues ya puedes respirar hondo por haber cambiado agujas en esa estación camino de la eternidad. Conozco esas vías por las que es dificil transitar aunque sea como copiloto. Enhorabuena. Un abrazo.
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¡Muchas gracias…/ Paz, -la vida/las vías/la carretera… todo se traza mejor con copiloto-
Abrazo de fin de semana!!
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