Cuando se marchitan... x+ los finos pétalos del honor, ensombrecidos por la capa del despecho, se quedan inutilizados los ungüentos y muerden su cólera los harapientos. Ya todo se olvida, nada permanece. La habitual discordia anida en la mente... La sangre está en huelga, el cuerpo está ausente. Ya la descomunal discordia bate sus alas rotas sobre los sombreros negros, engalanados por el brillo sereno que les da el sol y el cielo. Y no son nada más... que tapas de ollas cociendo muertos.
Mes: diciembre 2018
Sólidas porcelanas
Sólidas porcelanas x? con sus culos chocan entre los demás cubiertos, buscando en la mesa su guiso/su condimento. Y lanzadas, hasta perecer en el intento, estrujan el tejido del mantel contra su pecho. Mientras tanto... el fregadero atento, espera rozar sus senos con la brisa del jabón y el estropajo de acero.
Si paseas
Si paseas sobre nubes grises x? de cielos nublados y no sale el sol... ya verás a la fría realidad, que en mesa sin cubiertos te han de dar. Y si quieres abrazarte a algo que amas de verdad, verás cómo te engaña y lo perderás. Porque todo cambia, nada vale ya, todo es relativo, sigue siendo frialdad. Todo se marcha a un ¿qué será...? y no puedes sujetarte a nada más. Y entonces... te ves obligado a vivir como los demás; con indiferencia y falsedad.
Rebosa la espuma el cemento
Rebosa la espuma el cemento x? que acordonan las aguas mansas ocultando en su interior la garganta que las lanzan. Es agua de fuerza y luz, de capa y espada que con sus minúsculas gotas tejen cortinas aladas. Hueles a humedad fresca, tragas saliva templada, hasta flotas en sus pompas sobre las losetas mojadas. Partiéndote el esternón, -si te descuidas...-, en el filo de su balaustrada.
Grandioso grito
Grandioso grito xx sordo como mudo... que me dejas extasiado a cinco instantes, de saborear tu decir. Quisiera comerme en cuatro partes la ilusión de volver a esos hermosos días. Todo pasa... y llega uno a sentirse como ropa usada, tendida en pobres alambres oxidados por el tiempo.
Se deslizan por las tejas,
Se deslizan por las tejas, x? coquetas y esculpidas bandadas de gotas hasta acariciar la cornisa. Clavando sus fauces de gargantas suicidas, se funden en bolas de cristal fieles a su cita. Precipitándose contra el suelo, ese galán entero que las devora... moliendo hasta sus huesos.
En mi tranquila habitación
En mi tranquila habitación x? derrumbo sin saber cuántas paredes quedan por hacer... Y cebado por su perverso encanto, me disuelvo en el cauce amargo de esta dilatada noche, solitario refugio del plácido verano. Pero pronto otro día llegará... y, encerrado en la máscara de tinta/ de pasta de cristal, hoy te dejo estrellado en el folio blanco, cornisa fecal... ese de no decir nada/ -calvario de mi soledad-.
Corretean
Corretean entre lagunas turbias x? de polvorientas ventiscas las cálidas arenas, las tiernas ramillas. Rebozan sus truenos las nubes sobre el oscuro horizonte pendientes de romper su abadía. Refrescante chispa/ poción divina. Es la lluvia... piel cobriza.
Melodía angustiosa
Melodía angustiosa x? de esencia vital... templada en fraguas de hojas de cristal. Odiadas ilusiones de un segundo fatal. Prostituta del alba, hoy te rompo en mi "ná". Asqueroso rato de dos sueños, te odio a matar...
Grabados de trapos viejos
Grabados de trapos viejos x? vagan meditabundos por el cielo. teñidos de oro burlón, atravesados por espadas de fuego. Es el aliento del pincel volátil que galopa por la inmensidad del lienzo para anidar, como brasa que arde, devorado por el horizonte rodrejo. Es el señor inquisidor que nos deja a oscuras y se marcha despierto...