El diablo con su cola de flecha x
apunta directamente hacia donde tú estás.
Haciéndote el remolón
como si no fuera contigo la cosa...
tiemblas igual que la hoja de papel
en las manos del culpable/
o de un borracho.
Pecas tan a menudo.../-cada vez
que se te presenta la ocasión-
porque compruebas/has visto
que no te pasa nada...
Pero él ya ha decidido
lo que va a hacer contigo
cuando menos te lo esperes;
-en cualquier momento...-
Te va a colgar del cuello/garganta
atado de pies y manos
al filo de una tapia llena de vidrios
en el mes de los gatos en celo...
-vagabundos y sarnosos-
gritando/peleando los unos con otros
por querer echar un polvo.
Para que purgues bien tus fechorías
para que te arrepientas...
Mientras te arañan/se agarran a ti
con sus garfios de uñas para no caer
sacandote los ojos y/las tripas
como a un pescado...
Mientras te surge la duda
del gato de Schrödinger en sus barrigas.
-No me lo imagino...?
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Me gusto el poema y me generó una duda.
Me gustaría conocer tu opinión, el Gato de Schrödinger es ya una referencia común? O sigue siendo algo desconocido para la mayoría de la gente?
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Depende del interés de la gente por la ciencia…
Para mí sigue estando de actualidad, porque es un enigma sin resolver…
y eso siempre me parecerá interesante…
Gracias por tus palabras, José…/Saludos!
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Eso me gustó.
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Habrá que ver si el diablo es real o no. Puede que sea parte de una paradoja y así como puede encarnar el mal, también puede ser juzgado de la misma manera, entonces la pregunta del millón es: ¿Juzgar le corresponde a…? Nadie esta exento de juzgar o ser juzgado. mientras pensemos en Schrödinger .
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Exacto, siempre la losa/luz de la duda…
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