Quién no ha jugado con una mosca…

Quién no ha jugado con una mosca    xx?
y le ha cortado/arrancado sus alas.
Quién no ha aplastado una hormiga con el dedo.
Quién no ha pisado un caracol sin ir distraído...
Quién no le ha dado un puntapié al perro/gato "a casico hecho".
Quién no ha puesto veneno para los ratones/ratas
o ha echado insecticida para los mosquitos, avispas, cucarachas.
Quién no ha pensado tomarse alguna pastilla de más, tirarse
por el balcón/a las vías, o a la vecina...

A quién no se le ha pasado por la cabeza lo absurdo
del papelón que ensayamos, para no debutar nunca
ni ser jamás aplaudidos/comprendidos
más que por el director gruñón de la obra
que todavía confía en nosotros y de que todo acabe bien.
O en el mejor de los casos...
  de que todo esto sólo sea una gran mentira/"metía"
y no nos valga para nada.
Quién no ha pensado alguna vez si merece la pena...
O en ese supuesto, ¿por qué a mí, así...?

¿No sería mejor haber sido una lagartija/una araña?
¡Qué sé yo!, ¿o un saltamontes?
Por decir algo...

Mira, todos menos a este del que me quejo,
ni de todo cuanto conozco y deseo..., 
a él, -mi yo-
es al único que no me llevaría otra vez de viaje.

-Pobrecito mío, lo vas a dejar con el moño hecho.
Siempre echándole la culpa de lo que te pasa.

No te preocupes más por mí ni por él, tú...
Aquí puedes largar y no te cuesta dinero
ni visitas al médico de la cabeza.
Lo importante es que te encuentres
y te sientas bien...

Gracias “mini yo”, qué comprensivo eres,
pero el día menos pensado os voy a borrar a todos del mapa,
-ojo al parche- que estoy en ello.
-Ya,  
pero que sepas que... el que avisa es un traidor
porque después nunca lo cumple.
¡Que valiente eres, colega... al otro lado de la nada!

Que echen a rodar

Que echen a rodar nuestras cabezas           xx+
-cortadas a temprana edad-. 
Lancémonos en peregrinación/persecución
cuan balones fueran...   -y juguemos con ellas-
como si nunca hubieran tenido vista/oído/
olfato.../                   ni cuerpo...!

Dejemos volar la imaginación del dragón dormido/
-de su interior-
           del conjunto de la estatua de bronce
en lo alto del edificio/esqueleto/azotea...
Dejémosle soñar para cuando despierte otra vez
buscando donde caerse muerto.

Levantemos con fuerza la tapa de nuestro sepulcro
              y arremetamos con ella al gentío.../
-cortejo fúnebre en retirada-.
Aplastemos con la voz de nuestro nombre
la cucaracha de vida mundana/     insana...!
de la que nos hemos ido alimentando día a día. 
         Para volver.../ y descansar para siempre
en un lugar apartado/       -cautivos pero con honra-.
Donde los malos hierbajos no enturbien nuestra mirada
al incorporarnos por última vez 
a contemplar la tierra...

Un momento...
Si miras.../ -y te fijas en el segundero con atención-
el tiempo parece que se detiene.
¡A que sí...!?
-¡Eh! Que hemos llegado...
            ¡Ya está bien por hoy!

Pues/eso...  /otro beso con queso.
  -¡Qué besucón eres.../fantasma!