Reportero castrense

Reportero castrense     x+
en burdel de alcoba.
Privilegio de sapo
en el salón de los castigos...
Espía eventual
de carcajada marital.

Nunca querrás morir
porque muerto estás...
Nunca querrás vivir
sin el más allá.
Nunca será poco
hasta que dejes de soñar...

Recuerda que la vida
es un movimiento amable
en la supervivencia/sepultura 
de tu ser animal 
-desenfundado 
de la cartuchera del tiempo-.

Puede que algo diferente...
con los mismos colgajos
-mejor o peor-
pero como los demás.
Sólo eres otra oportunidad
de un mundo casual.

P.D.
Y tú abrazado/agarrando farolas
como un borracho perdido
en mitad de la noche.
Con los ojos extraviados
por los reflejos de la luz
en el cielo de los charcos...

No podemos escapar
de esta trampa.
-Somos la cobaya
en la mesa de experimentos
del laboratorio de Dios-.

Somos lo que nos dejamos hacer...
Mientras sigamos sin conocernos
nunca sabremos contra quién debemos luchar/
Amén.

Colgajos, sólo colgajos…

Colgajos, sólo colgajos              xx?
atados al palo del hechicero/druida
con cara de perro pachón de pelea 
porque no le compran ni un décimo, ristra
para la suerte que ni él mismo da
porque no la tiene.

Quieres un anticipo de lo que te deben
por el sacrificio, ¿verdad?
Te gustaría saber algo más del viaje de vuelta.
¿A que sí?,
pues a mí también.

-Hay pocas distancias que salvar.
¡Que lo sepas!

¿Cómo de accidentada
debe de llegar a ser una vida?
Te preguntas.

A mí me gusta pensar que todos,
absolutamente todos, alguna vez 
-en la igualdad de lo justo-
hemos sufrido algún tipo de daño
en mayor o menor cantidad.

-Así que mal de muchos...
alivio de majadero.

¿Para qué aspirar a otra cosa?
Si todo apunta en una única dirección.
Al fin y al cabo esto parece que nos va a llevar
en el mismo tiempo al mismo sitio...

Morimos tan lentos en nuestra mente.
Es tan suave la inercia del viaje/viraje 
hasta las huellas de la última frenada...
Y esa angustia del retroceso/retorcimiento/receso 
con los recuerdos 
induciéndonos al vómito sobre las sotanas 
del cura/cura amañada por el confesor...
-Ese intercambio de intermediarios entre lo divino
y lo que nunca sabrás-.

¿Para qué, y a quienes va dirigido este espectáculo?
¿Y qué gano, saco yo con ser el actor doliente/principal?
Si al final nada cuenta en nuestra defensa,
sin ningún otro premio sonante
que no sea el fluir del alimento espiritual en proceso 
hacia ese alma/arma que nos han adjudicado
invisible/insaciable hasta reventar...
En el solo y loco bancal/
              soliloquio de la promesa.

Todos los libros sagrados y sus detractores/
afines doctores en la ciencia de lo oculto
nos invitan a lo mismo desde los confines de los tiempos.
Al no saber... Para que sea sólo suya la respuesta.
¡Menuda bobada!
Pues/puestos a ignorar, ignorémosles a ellos también.
Porque esto es más sencillo de lo que parece, 
o así creo...

Todo empezó mientras flotábamos...
al despertarnos aterrados entre sangre y llanto
enganchados a la tripa de mamá. 
-La que cortaron de un seco/severo tajo para siempre-.
Trauma del que no nos liberaremos nunca
igual que no lo pudo hacer el Coronel Kurtz 
con el tema de la guerra, en Apocalypse Now...

Y nos dormiremos en el soñar del mejor de los sueños
el de la pesadilla que se muerde la cola 
que se inmola entre maderas a orillas del Ganges
entre la piedra, el agua, la tierra y el ladrillo.
Mascullados por la zalamería de algún rezo
o asesinados por el agente intruso/instrumento
enviado de la CIA/JHS.

En esa ceremonia insignificante de rutinas/ruina
como saludo y adiós a la vez 
de lo intangible hacia lo ininteligible.
-Queda muy bien, -me lo imagino-
por aquello de la gente que te quiere
y te vienen a despedir con su acto de respeto/silencio
sabiendo que nunca volverás a estar 
de cuerpo presente (o al menos con el mismo) 
entre ellos.
Y si lo adornan con el Salmo 23, "El Señor es mi pastor..."
pues de tralla.


¿Qué más da de donde vengas o a donde vayas,
o qué hacemos aquí...?
Esa última sería la pregunta correcta,
por lo que tiene de ireal.
Pero tampoco me preocuparía mucho...

Al final lo mires por donde lo mires
sólo vamos a ser eso...
Otro puñado más de nada encima 
o debajo de la pobre madre Tierra.
Ceniza insignificante como consecuencia
de un polvo estéril y volátil
acabada nuestra ración/cota/corta misión... 
Sin haber conocido al jefe 
ni los designios de sus objetivos para con nosotros.
Porque eso de "a la imagen nuestra o de su semejanza" 
también parece que sea de pega/un engaño.
Nada más, sólo eso...

-¡Pues bueno!
¿A qué hora se cena?, 
después o antes de la resurrección...
que ya me gritan los culebros de la barriga

¡Que va en serio tio!
Ten/pon un poco de cuidado/gasta algo de formalidad.
-Es que tengo más hambre que Dios...

Chupo el torso curvo

Chupo el torso curvo                xx+
del cristal de la botella
porque no alcanzo a hincarle el diente.
Así me entretengo...
como un bebé nervioso/con azogue,
al que le están saliendo los dientes.

Estiro/encojo los pies...
suelto las telas, las lío
esperando llamar tu atención.
-Que me hagas caso...-
que me arropes tan tiernamente,
como sólo sabes tú.

Hasta juego obediente
entretenido con las "chuches".
Mareado con el tío vivo,
el "gusiluz"
y todos esos colgajos
que utilizas para despistarme...

Pero mi boca se abre
como la de un pez
que necesita respirarte
y lo único que me acercas
es la punta de tu dedo índice
donde me agarro
hasta quedar dormido.

Esperaba alguna caricia
cremitas, unos polvos...
¿¡Pero ya estoy soñando!