Ese manantial bífido xx del que no se puede beber sin mojarte la cara... Ese astuto instinto incorregible que parte en dos mitades exactas la tarea encomendada. Insidioso linaje de monsergas, estúpidas/esculpidas/escupidas, pegadas al rostro helado de las obligaciones que se hacen la estatua embadurnada por las pinturas de guerra/ ideas libres de alas blancas que no respetan a nadie. Donde los gestos de lo convenido/convencional se vuelven girasoles en el campo de concentración de la memoria. Miseria, abatimiento/aburrimiento oscuro del fin de tu depilación láser/ desilusión... Unos dedos que te penetran/entran para coger mejor la calavera por las oquedades de tu fachada, rozando el pulido nácar, cielo. Cieno ciego del pensamiento colocándote en un pedestal/pedregal para que te vean/embarres bien con tus enanos de circo, sentimientos. Un foso de serpientes para ti; venenosas/musculosas, larguísimas donde caía el malo en las películas de romanos. Eso es lo que te hace falta... -Y alguna golosina/pipas para el intermedio... y gaseosa bien fría, con limón o Fanta. Y el humo del LM/Lark atravesando tu garganta con su rico sabor a tabaco rubio, a cine de verano... Y que te pida una calada y se la pases de tu boca/besando sus labios... Y las estrellas como bombillas led lejanas y el tren y las sillas de palos de madera entrelazadas sobre el chinarrillo . Y el sonido sensurroum retumbando la negrura pincelada de las siluetas de las sombras de la noche. Y lo mejor de todo, la pantalla sacándote de allí cogido/abrazado a tu chica/abducidos por una nave especial de sueños/cariño inolvidable que se quedó en aquel lugar... ¡Dios, saca esto del poema! -No, no ves que sólo es una variante al castigo diario/el bello recuerdo...